Orea Hotel Angelo Praha, Praga (CZ) - Ofertas y Reseñas

100% recomendable for un viaje

Lujosa habitación, deliciosa comida, con un desayuno bufet variado y un personal amable siempre dispuesto a ayudar, lo que hizo que mi estancia de tres noches fuera increíble, además de contar con wifi gratuito y estar a menos de 4 minutos de múltiples paradas de transporte.

Nada, todo estuvo bien.

El personal fue increíble, siempre con una sonrisa y muy atento. El desayuno bufet tenía una variedad impresionante que deleitó nuestros sentidos cada mañana.

Ubicación cercana al transporte público, baño espacioso y bien acondicionado, excelente conexión Wi-Fi.

El sistema de ascensores necesita mejoras, con demoras en horas pico y problemas con tarjetas desmagnetizadas. Las habitaciones frente a la calle son ruidosas y las opciones de entretenimiento son limitadas en el hotel.

Una experiencia memorable en Praga

Pasamos cuatro noches increíbles en una habitación deluxe. La atención del personal fue excepcional, con detalles como una cafetera y selección de tés siempre disponibles. El desayuno bufet destaca por su variedad, garantizando un buen inicio de día. ¡No olviden disfrutar del café de la tarde!

Recomendado para parejas que buscan comodidad

El desayuno fue increíble, había una gran variedad, y el personal siempre estaba ahí para ayudarte. Recibí un trago gratis en el bar del hotel, un detalle que te hace sentir bien.

No era barato, claro, pero sigue siendo aceptable.

Desayuno excepcional y personal muy atento.

Siempre pensé que la habitación sería limpia, pero había tanto polvo en la moqueta que casi me ahogo. Además, en verano amanece tan temprano, que las cortinas no me dejaron dormir. Esperaba un pequeño gesto de cortesía, pero nada. Casi escribo una buena reseña, pero no pude. Simplemente no lo merecen.

La habitación era muy cómoda, pero cambiaría las cortinas para la luz del amanecer.

la habitación era muy cómoda, con un colchón perfecto. no había pantuflas en la habitación.

Habitaciones limpias y bien cuidadas, y la ubicación cerca del transporte público es ideal. El ambiente en el lobby es superagradable y el café de bienvenida es un detalle muy bonito.

Eso sí, el ruido de la calle me hizo sentir que estaba en una fiesta que no me interesaba.

Orea es un lugar fantástico. La cama es enorme y súper cómoda, ideal para descansar después de un día explorando. El desayuno es increíble, con una variedad que satisface a todos, incluido un barista para hacer café fresco. También, el gimnasio está bien equipado y la limpieza del hotel es impecable.

Lo puedo recomendar.

Nos alojamos en un Deluxe Double or Twin Room y fue una experiencia maravillosa. La habitación era amplia y muy limpia, además contaba con un minibar y una tetera, lo que fue útil para disfrutar té por la tarde. La cercanía del tranvía facilita el acceso al centro en pocos minutos y el desayuno era increíble, con opciones tanto frías como calientes.

Nada negativo que resaltar.

El desayuno bufet fue una verdadera delicia! Una variedad increíble de platos calientes que se convirtieron en un festín para mis papilas gustativas. Además, el personal del bar siempre era amable y me sorprendió lo bien que preparaban el café al instante. En mi estancia, aprecié cómo me guardaron las maletas después del check-out, facilitando mi último día en Praga.

Entiendo que no se fume mucho en todo el país, lo cual es totalmente normal, pero sería genial tener un área cubierta afuera donde disfrutar un cigarrillo sin mojarme. Era un lugar donde sentarse, pero se sentía un poco expuesto a la lluvia. Aun así, un 10/10 en general.

Habitación cómoda, desayuno variado y delicioso. Ubicación buena, fácil acceso a transporte. El personal super amable, siempre con una sonrisa. Aunque el ruido de la calle puede molestar un poco, la experiencia fue bastante agradable.

volvería sin duda

Las habitaciones son super amplias y cuentan con camas cómodas, además de tener una excelente limpieza. Tienen un minibar y una cafetera, que es súper útil. El gimnasio está bien si quieres hacer ejercicio, y el desayuno es variado con un barista que prepara café fresco. Todo a mano, y el metro está a un paso.